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CONVIVENCIA VOCACIONAL


Cristo no es la única opción de vida
pero te garantizamos
es la "MEJOR"


No tenga de miedo de abrir tu corazón a Cristo
y seguirle.


La vida merece la pena ser vivida plenamente
Hay pasos que dar y decisiones que tomar
LEVÁNTATE Y ANDA!


Ven y descubre con ayuda de la Iglesia
que quiere Dios de ti.










ORACIÓN



“Seducidas por Jesucristo Redentor al estilo de San Pablo”( Gál 2,20 s)




Monición de entrada

Pablo de Tarso, es uno de los grandes seducidos por Jesús, nos ha dejado testimonio de esta seducción y de este amor en todas sus cartas. Amor que una vez probado, no pudo apartarlo de su yo más íntimo, dando a toda su persona consistencia y solidez, sentido de ser y de existir, de combatir y de amar, de búsqueda y de encuentro cotidiano con este amor, plenitud de cuanto había deseado. Jesús sigue llamando como lo hizo con aquellos primeros discípulos. Su espíritu redentor anima  a toda la familia mercedaria desde sus inicios, por ello, nos sitúa ante un horizonte excepcional de vida nueva: Dar la vida como El la dio por nosotros. Los gestos y palabras de Jesús buscan siempre liberar al hombre oprimido por el peso del pecado. Con palabras del apóstol Pablo tendríamos que repetir constantemente con un convencimiento pleno de que nada hay comparable al amor de Cristo Jesús.

El tiempo de verano, espacio de vacaciones y descanso, nos ayuda a pensar a buscar y plantearnos muchas cosas. Hoy vamos a orar por las vocaciones, a pedir al Dueño de la mies que haga sentir en el corazón de los jóvenes el anhelo de seguirle y entregar la vida por el prójimo necesitado; también por los  sacerdotes y ya  consagrados para que le sigamos con generosidad sin límites y con amor renovado
Dejemos que el mensaje de Cristo Redentor nos ayude en este rato de oración, a comprender y a vivir mejor nuestra vocación de corredentoras a imitación de María.


Oración  (Recitado por una salmista y cada dos estrofas cantamos:)

Cantada “Tú, Señor me llamas, Tú Señor me dices, ven y sígueme, ven y sígueme, Señor, contigo iré, Señor contigo iré.


1.- Si Jesús me llama le diré que sí.
Quiero que esta máxima dirija mi vida.
Tú puedes llamarme también a mí,
Porque llamas a cualquiera, santo o pecador,
Llamas a todas las edades.

2.- Si Jesús me llama le diré que sí.
Cuando me llames, ayúdame a no fijarme tanto en las renuncias
 Y sí en tú amor que es más grande que todos los amores.
Tú, Señor me llamas…

3. Si Jesús me llama le diré que sí.
En este momento mi corazón salta de gozo
Al pensar que seguramente me estás llamado.
Me alegro y canto de alegría al pensar en tu elección.

4. Si Jesús me llama, le diré que sí.
Y Tú me llenarás de gracia  y de alegría
Y todas las renuncias me parecerán pequeñas
Y nadie podrá quitarme la alegría de encontrar en tu llamada sentido a mi vida.

Tú, Señor me llamas…

5.- Si Jesús me llama, le diré que sí.
Y marcharé, dejándolo todo, para vivir contigo
Anunciar el Evangelio y poner la mano para redimir al cautivo.

6.- Si Jesús me llama, le diré que sí.
Y seré inmensamente feliz, porque tendré todo tu amor
Y podré dar de ese amor y derramar caridad redentora
Sin cálculo ni medida.

Tú, Señor me llamas…

7.- Si Jesús me llama, le diré que sí
Llama, Señor, a tantos jóvenes que inquietos te buscan,
Que tu llamada llene el vacío de sus vidas
Haz que en este encuentro escuchen tu palabra, te miren cara a cara
Y descubran tu llamada a seguirte.

Gloria al Padre y al Hijo y al espíritu Santo…

Tú Señor me llamas…

1ª Lectura Fil. 3,7-10



Comentario:

Juzgar que todo es pérdida ante el conocimiento sublime de Cristo Jesús y tenerlo todo por basura con tal de ganar a Cristo y de ser seducidas constantemente por Él, es sabiduría del corazón.  El amor que Pablo sintió fue tan fuerte, que toda su vida fue respuesta a ese amor del Señor, entregando toda su existencia al Reino.
Nada ni nadie, debería estar en nuestra vida por encima del amor de Cristo. ¿Cuál es mi experiencia al respecto?.

CANTO: Te damos gracias porque nos llamas..

Silencio orante

2ª lectura: Rom 8,35

Comentario

Nada ni nadie nos podrá separar nunca  del amor de Cristo Jesús. El espíritu de Jesús, nos sostiene unidas a Él con ese fuerte vínculo del amor, creado por la entrega hasta la misma muerte
Nosotras hermanas mercedarias de la caridad, seducidas por Jesucristo Redentor, somos mujeres privilegiadas, que hemos experimentado el gran amor de Dios, manifestado en Cristo en todos y en cada uno de los momentos de nuestra existencia.


CANTO:  

Silencio orante:
Oración compartida:  

Finalizar con un canto a María

2 comentarios:

  1. La Felicito por esta gran labor, que Dios la bendiga

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  2. Muy bueno Hermanas. Dios las bendiga por compartir fraternalmente sus dones.
    Paz y Bien

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